Las distintas características que tiene cada tipo de malla ayuda a que podamos sacar mayor provecho de ellas al utilizarlas. ¿Ya conoces las diferencias de cada una? En este artículo te dejamos lo más representativo de cada uno para que las conozcas a detalle.

Rejacero

La malla rejacero, como su nombre lo indica, son paneles rígidos de acero que constituyen rejas resistentes y firmes. Existen en distintos modelos como el clásico, florentino, barroco, gótico, entre otros, pero todos se constituyen de los mismos materiales.

Su diseño le da estabilidad a la estructura donde se emplea además de que impide también que sea escalable, por lo que son muy eficientes en cuanto a términos de seguridad.

Además, son fáciles de instalar y generalmente podemos encontrar en conjunto todo lo que necesitamos como postes, puertas, abrazaderas, bases, etc. Y lo mejor es que el precio es bastante recíproco a su funcionalidad y calidad.

Malla Rígida

Estas mallas se fabrican con alambre galvanizado y en ocasiones se cubren de PVC, aunque esto no es necesario.

Son altamente durables y además son flexibles, por lo que sus usos pueden ser muchos. Ya sea para delimitar secciones, proteger o hacer divisiones. También cuentan con el factor de resistir la corrosión por lo que pueden usarse en exteriores sin ningún problema.

Malla Ciclónica

Se componen de alambre entretejido y forman rombos por medio del entrelazado que lleva el alambre en zig-zag. 

Estas mallas solemos verlas en estacionamientos, zoológicos, jaulas, cercado de protección, entre otras aplicaciones de las mismas.

Gracias a sus materiales es altamente resistente a la corrosión por lo que tiene una larga vida útil, es fácil de instalar y de maniobrar por lo que es muy accesible al utilizarla y  cuenta con medidas óptimas de altura y de largo.

Malla Criba

Este tipo de malla también se compone de alambre galvanizado que estructuralmente se entreteje para crear cierres resistentes entre sus huecos. Es por esto que es muy sólida y firme.

Al igual que algunas otras mallas, es muy funcional para ser usada como cerco de protección, pues incluso hay algunas donde tú puedes decidir qué tan abiertas o cerradas están la conformación de la malla. Por esta misma razón podemos ver su uso en la construcción de jaulas de aves, pues si bien puedes controlar la ventilación que puede pasar, también asegurar que tus mascotas no se lastimen ni intenten escapar.
Son muy versátiles, hay distintos milímetros de diámetro, largo y alturas, por lo que puedes encontrar el modelo que se ajuste a tus necesidades.

Malla Hexagonal

Esta malla es igualmente fabricada de alambre galvanizado en caliente y re-trefilado en húmedo. Como se indica en su nombre, el tejido de este tipo de malla forma hexágonos.

Una gran ventaja de esta malla es que es muy moldeable y blanda por lo que es fácil de adaptar. Es compacta y fácil de transportar y manejar.

Multimalla

Esta malla se compone de alambre soldado, galvanizado y entrelazado. Las formas que la componen son cuadrados o rectángulos, dándole un aspecto muy homogéneo.

Los usos más comunes para este tipo de malla es en contenedores, jaulas, exhibidores e incluso en fijadores de materiales. Se puede encontrar en distintos tamaños y calibres.

¿Qué te pareció esta información? Conocer las características y ventajas de los materiales que requerimos nos facilitan la elección al comprarlos. 

Te recordamos que en Grupo CM contamos con estos modelos de mallas y puedes cotizarlos en cualquier momento. Nuestros asesores te ayudarán vía inbox de Facebook o en nuestro sitio web.