Debido a sus grandes beneficios y su costo tan económico las láminas galvanizadas son uno de los materiales predilectos para la construcción de techos. Este tipo de láminas se destaca por su durabilidad. Sin embargo muchas personas olvidan darle un mantenimiento periódico, el cual puede aumentar aún más su tiempo de vida.

En esta ocasión traeremos para ti algunos consejos que pueden ayudar a que tus láminas duren muchos años en perfecto estado.

Evitar largos periodos de exposición a materiales corrosivos

A pesar de ser un material con una gran resistencia a la corrosión es importante protegerlo de entornos corrosivos. Se recomienda utilizarlo en ambientes donde exista un PH de entre 7 y 11 para evitar este fenómeno químico

Evitar colocarlo con otro tipo de metales

Existen diversos metales como el cobre que tienen una característica ampliamente corrosiva por lo que combinarlo con el acero galvanizado aumenta en deterioro de ambos materiales. En caso de ser inevitable el contacto de estos elementos se debe utilizar un aislante que proteja la lámina.

Evitar raspar y/o rozar este material

Las láminas galvanizadas (como ya lo hemos visto) cuentan con una cubierta de zinc que protege este material de la corrosión así como de otro tipo de deterioros por lo que al raspar este material estamos retirando esta protección reduciendo su vida útil.

Evitar almacenarlo por amplios periodos de tiempo

Al almacenar un producto es imposible evitar crear un entorno húmedo y encerrado. Al exponer a las láminas galvanizadas a este tipo de ambientes estamos reduciendo su vida útil. Por lo que, en caso de tener que almacenarlo se recomienda hacerlo en un ambiente seco y ventilado, teniendo siempre cuidado de no raspar el material.

Proteger con una lona antes de colocarla

Si ya compramos nuestras láminas pero aún no las montaremos es importante protegerlas del medio ambiente. Por eso nosotros te recomendamos guardarlas en un lugar con ventilación, y en caso de estar a la intemperie cubrirlas con una lona que las proteja del agua.

¿Qué hacer si mi lámina presenta manchas?

Si cuentas con una o más láminas de acero galvanizado que presentan daños como manchas, no te preocupes aún hay algo que podemos hacer al respecto. Aquí te mostraremos cómo para eliminar estas molestas apariciones.

1. Es importante colocarnos todos los elementos de protección necesarios como caretas, guantes, entre otros. (Puedes encontrar estos elementos dando click aquí)
2. Crearemos una mezcla entre amoniaco y agua, usando aproximadamente 250 ml de agua por cada 50 ml de amoniaco. En caso de no contar con amoniaco se puede utilizar vinagre blanco o jugo de limón.
3. Comenzaremos a retirar estas manchas con ayuda de un cepillo el cual humedeceremos en esta mezcla. Se deben realizar movimientos circulares para evitar dañar el material.
4. Conforme las manchas vayan cediendo debemos añadir un poco de agua a la lámina.
5. Una vez retirada la mancha debemos enjuagar con abundante agua y dejarla secar. Este paso es indispensable para no dañar la lámina.
6. Y listo! tu lámina se verá como nueva.

Si no estás convencido de este método existe otra remedio casero de deshacernos de estas manchas

1. Primero deberás colocar una generosa cantidad de cera de abeja sobre el área afectada y dejar secar hasta tener una mezcla sólida.
2. Posteriormente, se espolvoreará sal en la cera ya solidificada.
3. Continuaremos tallando la mancha con un cepillo o una escoba.
4. Terminaremos retirando todos estos elementos con abundante agua y dejando secar la lámina.

Recuerda que en Grupo CM contamos con una amplia gama de láminas galvanizadas para proteger tu hogar en esta época de lluvias.